Cómo Comer Orgánico sin Romper el banco

Al acercarse las festividades, siempre excedo mi presupuesto alimenticio. Y con muchos productos alimenticios siendo más caros ahora que el año pasado, los gastos extra solo aumentarán.

Pero incluso fuera de las festividades, es difícil mantenerse dentro del presupuesto. Cuando vas al supermercado y te enfrentas a la opción de comprar el doble de una verdura convencional frente a una orgánica, te hace pensar.

Así que en este artículo del blog, doy cinco consejos que uso para comer saludablemente con un presupuesto limitado.

1. Come en casa. Para la mayoría de ustedes, esto es algo que ya hacen. Pero comer fuera o pedir comida para llevar es simplemente caro. Cocinar en casa te permite tener más control sobre los ingredientes que usas y las porciones que preparas. Las dos cosas más importantes que se me ocurren son poder usar ingredientes orgánicos y saber qué aceites utilizas. Incluso los mejores restaurantes orgánicos no pueden usar los mejores aceites de coco o aguacate para cocinar.

2. Compra a granel. Compro frutas secas, arroz, frijoles, lentejas y avena a granel. Y cuando compras a granel, el precio suele ser una fracción del costo cuando compras porciones pequeñas. Por ejemplo, 50 libras de avena cuestan $0.08 por onza frente a $0.56 cuando compras una libra. Dicho esto, encontré 8 libras de avena orgánica en Amazon por $0.12 por onza, lo cual es muy bueno. ¡Así que siempre busca!

Comparto estos productos con otra familia y los almacenamos en cubos de 5 galones. También tengo una colección de frascos de pepinillos de 1 galón que recolecté de la cadena de restaurantes de hamburguesas Five Guys. Estos recipientes más pequeños permiten un acceso más fácil a los alimentos a granel.

Compra tu carne a granel también.

No hace mucho, asistí a una conferencia sobre alimentación de la nariz a la cola en la Granja Polyface. Al salir de allí, me convencí de que necesitaba conseguir una vaca alimentada con pasto y terminada con pasto. No tardé mucho en encontrar una, ya que una amiga me envió un mensaje de texto diciéndome que conocía a un agricultor cercano que tenía disponible media vaca. Esto significa alrededor de 250 libras de carne después de ser sacrificada y envejecida a unos $6 por libra, desde filet hasta carne molida. Esto se compara con la carne molida alimentada con pasto de Nature Rancher, que cuesta $8.49 por libra en mi tienda local.

Dado que nadie tiene grandes cantidades de espacio en el congelador, rápidamente contacté a ocho personas para dividir la carne conmigo. Esto significa que cada uno tiene alrededor de 30 libras de carne para congelar, lo cual es muy manejable.

3. Compra carne con huesos y haz caldos. Puedes comprar un pollo entero y hacer varias comidas con él. Si haces esto, arroja los huesos en una olla y haz un caldo. Los caldos son muy ricos en proteínas y muy nutritivos. Puedes beberlos como una comida o usarlos como base para sopas. También puedes hacer caldos con huesos de res y huesos de pescado. Si vives cerca del océano, es posible que puedas obtener los huesos de pescado gratis. Y con esta vaca que voy a conseguir, me aseguraré de obtener los huesos para hacer un caldo. Si nunca lo has hecho, este video explica bien el proceso.

4. Ve cuando ya van a recoger el mercado de agricultores. Ya al final del día, los agricultores que no quieren llevarse productos a casa tienden a descontarlos. Incluso si no los descuentan, puedes aprovechar la oportunidad, después de ya pasada la hora de prisa para ellos, para conocerlos y hacer preguntas. ¿Cómo controlan los insectos si no fumigan? ¿Aceites esenciales? ¿Tierra de diatomeas? ¿Rotan cultivos? ¿Se preocupan por la regeneración del suelo? A muchos agricultores les encanta hablar sobre lo que hacen.

5. Compra los cortes de carne más baratos y brasealos. A menudo se llaman “carnes para guisar” y son duras porque tienen mucho colágeno. Sella el exterior de la carne colocándola en una sartén a fuego alto. Puedes ablandar la carne colocando verduras (zanahorias, cebollas, apio) en el fondo de una olla de hierro fundido, agregando agua hasta que las verduras estén casi cubiertas y colocando la carne encima de las verduras. Agrega tus especias favoritas como sal y pimienta y ajo, luego coloca el horno a 150-170°F para cocinar lentamente el contenido durante 4-8 horas.

6. Planta un Jardín de la Victoria. Los Jardines de la Victoria eran pequeños jardines de vegetales, frutas y hierbas plantados en residencias privadas y parques públicos durante la Primera y Segunda Guerra Mundial para suplementar las raciones, y para animar a las personas a sentirse mejor y más positivas. Si no tienes un patio trasero, busca un espacio en un jardín comunitario cercano.

Si vives en un entorno urbano o te intimida un jardín, puedes empezar plantando lechuga en un barril de vino, como se describe aquí. Tomará tres semanas antes de la primera cosecha y podrás comer de él durante meses.

Los Jardines de la Victoria típicamente tienen cosas como cebollas, col rizada, lechuga, frijoles, repollo, pepinos, remolachas, maíz, guisantes y papas.

Dado que ya hemos pasado la temporada de jardines, una forma fácil y barata de suplementar tus vegetales es germinar o cultivar microvegetales. ¡Con muchas semillas, puedes tener una cosecha en 3-7 días!

Y, junto con esta nota de jardinería, come frutas y verduras de temporada. Esto ayudará a mantener los precios bajos.

Consejo adicional: Haz suficiente para sobras cuando cocines. Mara siempre preparaba suficiente comida para servir a un pequeño ejército. Esto proporcionaba la oportunidad de recalentar cosas rápidamente y minimizaba comer fuera cuando estábamos demasiado cansados para hacer una comida al final del día. Pero si no comes sobras o te olvidas de ellas, este consejo no será rentable.

Por último, este sitio tiene sugerencias de aplicaciones de planificación de comidas para todo, desde organizar sobras hasta preparar comidas con un presupuesto. No he usado ninguna de ellas, pero acabo de descargar Paprika para probarla.